Dos
agentes pertenecientes a la
Unidad de Atestados, con más de 20 años de experiencia,
sobradamente especializados y con una trayectoria profesional intachable, han
sido expulsados con premeditación de su destino. A día de hoy, y tras pedirlas no
se ha producido explicación alguna respecto a los motivos de este
“traslado”, ni tan siquiera se les ha informado personalmente de
esta decisión. Nos resulta insólita esta falta de delicadeza.
Los dos
agentes se acogieron a la orden de playas 2013, y cuando llegó el momento de
tomar posesión de su nuevo destino provisional, se encontraron con una nota
interna de la Intendente General
Jefa de Tráfico, donde se les comunicaba que al terminar su
servicio de playas, ya no volverían a su antiguo destino, sino que pasarían a
realizar su servicio a Tráfico, sin más explicaciones.
1.
En la orden de playas
(en ninguna de ellas) no consta nada de que los agentes, cuando opten por
solicitar este destino provisional, se puedan encontrar con que luego no les
dejan volver a su destino. circunstancia que no se ha producido en ninguna
ocasión.
2.
Tampoco en la citada
orden existe limitación alguna por la pertenencia a Atestados, para poder pedir
el servicio de playas.
3.
El traslado no se
produce como consecuencia de una reducción de la ya deficitaria unidad de
Atestados en materia de personal si no que son “relevados” por
personal con menos experiencia y formación, con lo que el servicio obviamente
se verá afectado.
4.
Que el resto de policías
que han prestado dicho servicio han vuelto a su labor habitual, tal y como
especificaba la Orden del Cuerpo.
Con
esta inexplicable decisión se ha producido un mal precedente a nuestro entender
y un GRAVÍSIMO AGRAVIO COMPARATIVO hacia estos profesionales, fruto de una
evidente persecución personal, consecuencia de su actitud no resignada ante el
malestar reinante en atestados desde la incorporación al servicio del actual responsable
de dicha unidad.
Por ello y
tras pedir explicaciones a la Intendenta
General de Tráfico, esta esgrimió principalmente dos motivos
para haber tomado esta decisión:
1.
Necesidades de
servicio. 2 Capacidad para tomar esta orden.
Por
ello queremos denunciar esta inadmisible actitud dictatorial, injusta, discriminatoria
e indigna de cualquier mando de esta Policía Local que se precie y que
perjudica gravemente tanto a la dignidad, y la profesionalidad de estos
compañeros como a la propia Policía. Haciendo prevalecer
“galones” a “razones” por encima del buen
funcionamiento del servicio de Atestados prescindiendo de dos profesionales de
reconocida eficacia, ampliamente reconocidos entre nuestro colectivo, y cuyo
trabajo ha sido reiteradamente elogiado desde instancias judiciales.